Un grupo de padres de familia de las unidades educativas de La Paz cumplen hoy su segundo día de huelga de hambre. Exigen al alcalde Iván Arias la inmediata refacción y mantenimiento de unidades educativas, dotación de insumos de bioseguridad y que el desayuno escolar sea mejorado.
“Las unidades educativas están desatendidas, los padres compramos pintura para pintar las aulas, hacemos la desinfección, el deshierbe y adquirimos insumos de bioseguridad y es obligación del alcalde y hay molestia en los padres de familia porque las autoridades municipales salen a decir que están atendiendo”, protestó el dirigente de la Junta Escolar del macrodistrito Max Paredes, César Mamani, quien cumple la medida extrema en instalaciones del establecimiento Eduardo Abaroa, de la zona de Cotahuma, junto a otros dos padres.
El alcalde Arias accedió a un crédito privado de 175 millones de bolivianos, de los cuales destinó solo 20 millones para la refacción de la infraestructura escolar y dejó otro importante monto para el embellecimiento de parques y plazas, lo que significa que no existe un plan para las unidades educativas.
Mamani, indicó que esperará que el alcalde Arias, los convoque a dialogar nuevamente hoy viernes, de lo contrario los padres serán quienes asuman otras medidas que se llevarán a cabo la próxima semana.