Luego de que la Confederación Nacional de Trabajadores en Carne de Bolivia (CONTRACABOL) anunciara un incremento en el precio de la carne de res, el gobierno nacional organizó una serie de controles en centros de abasto de los departamentos de Santa Cruz y La Paz. En caso de confirmarse agio y especulación se iniciarán procesos legales contra los culpables.
En el control llevado a cabo hoy, el viceministro de Comercio Interno, Grover Lacoa, el personal de la Alcaldía de Santa Cruz y el Viceministerio de Defensa de los Derechos del Usuario y Consumidor, verificaron que, si bien se produjo un leve incremento en el precio del “kilo gancho” que compra el carnicero, ello no repercutió en el precio final al consumidor. Lo mismo sucede en La Paz, donde el viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, efectuó operativos de verificación.
“Nosotros, lo que estamos haciendo es defender a los consumidores que se ven afectados por las amenazas y advertencias y, para evitar este incremento, se debe convocar al diálogo a los internadores que están incrementando el kilo gancho y a los ganaderos que también están incrementado de pie de ganado y kilo gancho”, aseguró Silva.
Por su parte, la Federación de Juntas Vecinales de Santa Cruz se declaró en emergencia ante las amenazas del incremento, por lo que solicitó al Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural que se envíe equipos de fiscalización para que se detecte a los intermediarios que estarían asumiendo esta disposición anunciada por su dirigencia nacional.