Aunque separados por más de medio siglo de historia, Evo Morales y Víctor Paz Estenssoro comparten sorprendentes similitudes en su forma de ejercer el poder y moldear el escenario político boliviano. Por lo cual, no sorprende mucho que recientemente se haya barajado que Morales vaya como candidato de ese histórico partido rumbo a las elecciones de 2025. Más allá de las diferencias ideológicas entre el líder indígena y el arquitecto de la Revolución Nacional de 1952, ambos siguieron los mismos caminos en el entramado político del país.
Tanto Morales como Paz Estenssoro construyeron movimientos políticos profundamente marcados por su figura. El Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) y el Movimiento al Socialismo (MAS) se consolidaron como fuerzas hegemónicas gracias a la capacidad de sus líderes para encarnar proyectos históricos amplios, aunque en contextos distintos. Paz fue la cara visible de la Revolución del 52, mientras que Morales se convirtió en el primer presidente indígena del país, emergiendo desde el sindicalismo cocalero para transformar el Estado boliviano. Del mismo modo, ambos tuvieron en el campesinado y el área rural los votos que sellaron sus victorias.
Los dos primeros mandatarios buscaron, en sus distintos contextos históricos y políticos, rediseñar el aparato estatal para consolidar sus proyectos. Tras 1952, Paz promovió la reforma educativa, el control del ejército y la creación de nuevas instituciones bajo la lógica revolucionaria. Morales, en 2009, impulsó una nueva Constitución que declaró a Bolivia como Estado Plurinacional, al tiempo que afianzó el poder del Ejecutivo y del MAS sobre los órganos del Estado.
El deseo de mantenerse en la silla presidencial también nubló el juicio de los dos, Paz Estenssoro, en su primera elección de 1951, había obtenido el 42,9% de los votos. En la segunda de 1960, ya con voto universal, había obtenido el 74,5%. Tenía dos tercios en el Congreso Nacional y ello le permitió modificar la Constitución Política del Estado introduciendo la figura de la reelección, hasta entonces proscrita. Del mismo modo, Evo Morales fue electo presidente en 2005 con el 53.74% de los votos, siendo el primer candidato en ganar con mayoría absoluta desde 1982. En 2009 fue reelecto con el 64.22% en la primera elección bajo la nueva Constitución, la misma que, al igual que Paz Estenssoro, modificó para poder ser reelegido. En 2016 llamó a un referéndum para poder volver a postularse como candidato, perdió, sin embargo, volvió a presentarse en 2019, algo que selló su salida del poder tras 14 años ininterrumpidos.
Sin embargo, quizás la mayor similitud entre ambos es su capacidad de transformación ideológica en función de mantenerse en el poder. Paz, que nacionalizó las minas y aplicó una reforma agraria, impulsó décadas después un programa de ajuste estructural y apertura de mercado en su último mandato. Morales, aunque surgió con un discurso antiimperialista y de izquierda radical, hizo también acuerdos con sectores de oposición y empresariales, algo que se incrementó posteriormente, durante el gobierno de Luis Arce, cuando se convirtió en el mayor aliado de la oposición.