El gobierno central lanzó en abril del pasado año, a través de Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB), una convocatoria para empresas que efectúen la Extracción Directa de Litio (EDL). De todas las empresas que se presentaron, se eligieron aquellas que cumplieran con condiciones como el menor consumo de agua, menor impacto ambiental, costos de operación y rendimiento.
Sobre este último punto, el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, expresó:
“En la convocatoria de abril de 2021, se pidió que toda aquella empresa que presente un rendimiento de separación del ion litio menor al 80% quede descalificada y sus resultados no serán tomados en cuenta. Si presentan un porcentaje mayor serán consideradas”. Luego de un proceso de selección, las empresas clasificadas para la etapa de pilotaje son: CATL Brunp & CMOC, Fusion Enertech, EnergyX, Lilac Solutions, CITIC GUOAN/CRIG, TBEA Group, Uranium One Group y Tecpetrol, de países como Estados Unidos, China, Rusia y Argentina.
Estudios realizados a pedido del Estado boliviano, a los que se suman otros llevados a cabo por la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), la Universidad Técnica de Oruro (UTO) y la Universidad Tomás Frías, muestran que Bolivia cuenta con aproximadamente 21 millones de toneladas de litio (solo en el salar de Uyuni), una de las riquezas naturales de recursos evaporíticos más grandes del mundo. En este entendido, se busca llegar al bicentenario de Bolivia proyectando al país como un competidor mundial en la explotación de este metal alcalino.
