La policía boliviana lleva adelante, desde hace dos semanas, el “Plan Candado”, operativos que buscan evitar el ingreso y circulación de vehículos indocumentados, posiblemente robados. En este trabajo se identificaron 67 ferias de este tipo de vehículos, 52 de las cuales se encontrarían dentro de la clasificación de “zona roja”. Al mismo tiempo, se identificaron 34 rutas fronterizas por las cuales los vehículos ingresan al país.
Sin embargo, el principal problema en la labor policial son los propietarios de automóviles indocumentados. Luis Nina, su representante, fue claro en sus amenazas a la policía:
“Nuestra postura es clara y frontal, los compañeros de las organizaciones de Cochabamba y Santa Cruz están dispuestas a todo. Quiero que entiendan, si ustedes del Gobierno incautan un vehículo, los compañeros de los municipios están dispuestos a quemar los retenes policiales. Si queman un vehículo, la población quemará dos retenes policiales”, amenazó.
Las ferias clasificadas como “zonas rojas” suponen mucho peligro para la actividad policial, puesto que sufrieron amenazas por parte de los dueños y vendedores de los vehículos, quienes los superan en número. Según la policía, la mayor cantidad de zonas rojas están ubicadas en Cochabamba, con un total de 14. En el trópico se identificaron seis: Chimoré, Ivirgarzama, Villa Tunari, Shinaota, Entre Ríos y Bulo Bulo.