En la reinauguración de la zona turística del parque Barranca de Amanalco, el puente colgante el Paseo Ribereño colapsó justo en el momento en que lo cruzaban el alcalde de Cuernavaca, Julio Urióstegui, su esposa Luz María Zagal, síndicos, regidores y una decena de ciudadanos de la capital de Morelos.
Las imágenes dan cuenta de que la veintena de personas cruzaba en un momento festivo, algunas incluso saltaban sobre las vigas de madera, cuando sorpresivamente el puente se desplomó y las personas cayeron de una altura de unos dos metros a un riachuelo. De acuerdo con personal de Protección Civil del Estado, de los 25 heridos, dos son considerados graves y 12 han sido trasladados a distintos hospitales, pero no hay reportes de fallecidos hasta el momento.
Horas después, el alcalde afirmó que el incidente se debió a una imprudencia: “Fue una imprudencia de alguien que empezó a saltar, no resistió el peso y nos caímos. Algunos tienen fracturas y golpes, pero afortunadamente no hay ningún lesionado de gravedad”, comentó en el exterior del hospital de Cuernavaca, donde fueron trasladados los heridos.