Panya Kamrab, un expolicía de 34 años que en las últimas horas compareció ante la corte por estar involucrado en un caso judicial en curso por presunta venta de drogas, ingresó a la guardería a donde asistía su hijastro y mató a más de 30 personas, 23 de ellos niños que dormían la siesta, dos maestros y un oficial de policía.
Usando cuchillos y un rifle automático, el sujeto inició su ataque y, al momento de huir, atropelló a varios transeúntes. Posteriormente, llegó a su casa y asesinó también a su pareja y su hijastro, quien no estaba presente en la guardería durante el hecho, para luego suicidarse con su misma arma.
“[El atacante] fue a buscar a su hijo de dos años, pero el niño no estaba allí… así que comenzó a disparar y apuñalar a la gente en la guardería”, dijo a CNN el portavoz de la policía, mayor general Paisan Luesomboon.
Desgarradoras escenas se vieron en las afueras de la guardería, donde los familiares de los niños muertos llegaron tras enterarse de la tragedia. Los detalles son investigados por la policía.