Lucio Méndez Gutiérrez, quien fuera elegido en 2022 como secretario general de la Federación Departamental de Choferes San Cristóbal, estuvo en el ojo público esta semana a causa del pedido de ese sector para que se efectúe una subida de pasajes en el departamento de Oruro. La medida no fue bien recibida en esa ciudad, por lo que sucedieron violentos enfrentamientos entre los choferes y la población.
En medio de estos conflictos, surgieron rumores acerca de que Evo Morales habría estado intentando avivar la llama del descontento con el fin de atacar al gobierno de Luis Arce Catacora. Así lo manifestaron algunos representantes que fueron testigos de reuniones entre Méndez y Morales, los mismos que aseguran que el ejecutivo de los choferes era invitado cada vez que el expresidente visitaba esa ciudad. Adhemar Wilcarani, alcalde de Oruro y sobrino de Morales, también habría participado de estas reuniones y por ello habría apoyado el incremento de tarifas del transporte público orureño.
Evo Morales fue declarado “persona no grata” por el Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade) y otras organizaciones orureñas, quienes lo señalaban por impulsar bloqueos en diferentes puntos del país y de atentar contra el carnaval de Oruro. Según fuentes extraoficiales, molesto por esta afrenta del departamento que lo vio nacer, es que Morales decidió apoyar los conflictos por el incremento de pasajes, todo en medio de la especulación por una supuesta falta de combustible.
Durante su gobierno, Evo fue conocido por “pactar” con dirigentes de distintos sectores con el fin de asegurar la estabilidad de su gobierno, algo que parece continuar hasta la actualidad.
