El Gobierno boliviano dio luz verde a los trabajos de explotación de un yacimiento de gas en Chuquisaca. Las operaciones de perforación comenzaron a principios de esta semana en el pozo Iñau X-3, en la provincia Luis Calvo.
Según la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), la región tiene grandes perspectivas para el desarrollo de petróleo y gas. Este pozo será el segundo que se equipa aquí en los últimos meses. El primero fue el pozo Yapucaiti X-1, ubicado en la serranía de Los Milagros, en el municipio de Huacareta de la provincia Hernando Siles. Las operaciones de perforación comenzaron hace dos meses y ya se ha alcanzado una profundidad de 1.350 metros.
“Es una gran noticia para Chuquisaca y el país, porque tienes grandes perspectivas de encontrar gas y petróleo por la zona en la que se ubica”, dijo el experto Fernando Rodríguez.
Según Iván Reynaga, miembro del consejo de administración de YPFB, la inversión total en los trabajos a realizar superará los 78 millones de dólares. La profundidad de perforación prevista alcanzará los 5.800 metros, con lo que se llegará a los horizontes gasíferos de la Formación Huamampampa ubicados en la región.
“Ya son dos pozos en perforación en Chuquisaca. Hace mucho no se veía algo así”, señaló.
El vocero de YPFB enfatizó que en Chuquisaca existen otras áreas petroleras y gasíferas prometedoras, con inicio de operaciones previsto para 2025. Se trata de Sauce Mayu, Ingre-X3D y Vituacua-X1. Iván Reynaga señaló que Vituacua-X1 es la más prometedora, con reservas estimadas en 2 billones de pies cúbicos de gas.
A pesar de la caída de la producción, el gas natural sigue siendo uno de los principales productos de exportación de Bolivia. En los últimos meses, el gobierno de Luis Arce ha intensificado los esfuerzos de exploración, que en los últimos años habían estado infradotados. Se espera que las medidas encaminadas a encontrar y poner en explotación nuevas áreas permitan al país aumentar la producción de hidrocarburos, lo que aportará ingresos adicionales de divisas al presupuesto y conducirá a una estabilización del tipo de cambio y de la situación económica.