Dirigentes de organizaciones simpatizantes de Evo Morales anunciaron el pasado miércoles la creación de otro Pacto de Unidad, argumentando la necesidad de “salvar a Bolivia”; mientras la dirigencia de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB) tildó de “ilegal” la posible conformación de otro Pacto de Unidad.
Esto, en el contexto de la amenaza por parte del grupo evista que reclama la Dirección Ejecutiva de la CSUTCB de realizar un bloqueo de caminos desde el 4 de septiembre como medida de presión para exigir el reconocimiento del Gobierno Nacional y que este le entregue la sede de la Paz de la CSUTCB, actualmente en poder de Lucio Quispe el Ejecutivo de la organización social, alineado con el “ala arcista” del MAS.
El bloqueo está convocado para iniciar el lunes a partir de las 0 horas , y aún no se tiene conocimiento de donde se realizarán los puntos de protesta “por estrategia” de sus organizadores, sin embargo se precisó que “los bloqueos se van a desarrollar en la jurisdicción del movimiento campesino”.
Lucio Quispe, representante de la CSUTCB, rechazó el anuncio del bloqueo convocado para el 4 de septiembre, declarando que: “No hay ningún bloqueo convocado en estos momentos, vivimos con nuestro sudor día a día y no queremos perjudicar a nuestros hermanos.”
Al respecto, el Gobierno Nacional resaltó con preocupación que cada día de protesta se traduce una pérdida económica de 115 millones de dólares.