Ante el acortamiento de los plazos para cumplir con el Estatuto y renovar la directiva del MAS-IPSP, el Pacto de Unidad viene realizando varias acciones, entre ellas el lanzamiento de una nueva convocatoria y el envío de una carta de invitación (la novena en este tiempo) para que Evo Morales asista a una reunión de coordinación en la que se buscarán soluciones a la negativa del Tribunal Supremo Electoral de supervisar el congreso.
Todos estos esfuerzos han sido saboteados por los seguidores de Evo Morales, quienes rechazan la realización de un congreso conjunto e, incluso, llegaron a rehusarse a recibir la invitación enviada por la CSUTCB, por lo que la misma tuvo que ser pegada en las puertas de la dirección nacional de ese instrumento político.
De no concretarse esta reunión logrando así subsanar las observaciones del TSE, la responsabilidad de la posible proscripción y pérdida de la sigla del MAS-IPSP caería sobre las espaldas de Evo Morales y sus seguidores, quienes manifestaron públicamente que no están dispuestos a ir a un congreso con quienes consideran “traidores”. Así lo manifestó el evista, exdirigente de la CSUTCB, Omar Ramírez: “Los leales no nos vamos a juntar en un congreso con traidores, prebendalistas, corruptos y oportunistas”.
Según militantes y opositores existe la posibilidad real de que los conflictos internos del MAS-IPSP, ahondados por la negativa al diálogo del evismo, lleven a la proscripción de ese importante instrumento político.
