A 44 años del asesinato de Marcelo Quiroga Santa Cruz ¡La lucha sigue!

4 mins de lectura

Hoy se cumplen 44 años de la muerte del político y líder socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz, quien fue asesinado por órdenes de Luis García Meza, militar involucrado en cientos de desapariciones y muertes como las del sacerdote Luis Espinal Camps y el dirigente Carlos Flores Bedregal.

La madrugada del 17 de julio de 1980, La Paz se despertó con el sonido de tanques y las voces de militares que se desplegaban por el centro de la ciudad en el que sería recordado como un golpe militar que marcaría la historia de Bolivia. Ese sería el abrupto final del gobierno de la primera mujer en ocupar la presidencia del país: Lydia Gueiler Tejada.

Ese fatídico día, Marcelo Quiroga Santa Cruz se encontraba en una reunión organizada en las instalaciones de la Central Obrera Boliviana (COB) en la zona de Sopocachi, ajeno a que la llamada “operación Mercurio” ya había entrado en ejecución. Terminada la reunión, los asistentes vieron llegar vehículos de los que bajaron militares armados que los hicieron abordar. En este trajín, se escucharon disparos que al silenciarse dejaron dos cuerpos yacentes sobre el piso, uno era el dirigente Carlos Flores Bedregal, el otro, Marcelo Quiroga Santa Cruz, quien aún continuaba con vida, según testigos de los hechos.

Lo que sucedió a continuación no es del todo claro, pero las investigaciones apuntan a que se llevaron a ambos en una ambulancia hacia el Estado Mayor en Miraflores, donde se ultimó a Marcelo. Luego de ello, por error, los cuerpos fueron a dar a la morgue del hospital de Clínicas, de donde se recogió solo el de Marcelo, para llevarlo a Mallasilla, donde se lo intentó quemar. Al ver que el fuego no había cumplido su objetivo, los restos volvieron a trasladarse, esta vez a un destino desconocido que fue cambiado por distintos testimonios a lo largo de los años.

Marcelo Quiroga fue ministro de Energía e Hidrocarburos durante el gobierno de Alfredo Ovando Candía, puesto en el cual consiguió la nacionalización de la Bolivian Gulf Oil Company. Poco después, al ver que el gobierno de Ovando se inclinaba hacia la derecha, renunció y fundó el Partido Socialista. Durante el golpe de Estado de Hugo Bánzer Suárez, Marcelo Quiroga tomó las armas y resistió junto a otras fuerzas, pero fueron derrotados, por lo cual salió al exilio viviendo en Chile, Argentina y México.

Su figura, como valiente defensor de la democracia, fue recientemente recordada porque el fantasma de la dictadura volvió a amenazar el orden constitucional y los tanques entraron nuevamente a la plaza Murillo con el objetivo de instaurar un gobierno militar. En ese contexto, fue fundamental el papel de la resistencia y de los que “se quedaron” para preservar los valores democráticos frente a la violencia y las armas.

A 44 años de su muerte, los bolivianos continúan exigiendo justicia y que se revele la ubicación de los restos de Marcelo. Las organizaciones sociales y los ciudadanos en general también se declaran vigilantes ante cualquier intento de atentar contra la democracia, y así lo demostraron el 26 de junio, cuando la rápida acción popular frenó el intento de golpe de Estado. Estos acontecimientos revelaron la fragilidad de la democracia en Bolivia, lo que le da nueva vigencia al grito ¡MARCELO VIVE, LA LUCHA SIGUE!

Anterior noticia

¿La derecha no dialoga?

Siguiente noticia

¿ES KAMALA LA SUCESORA DE BIDEN?

Latest from Blog