Suman las voces de indignación y rechazo, desde el ámbito judicial y la sociedad civil, ante la reciente decisión de la jueza de sentencia N° 14 de Santa Cruz, Lilian Moreno Cuéllar, quien por segunda vez dejó sin efecto la imputación y orden de aprehensión contra el exmandatario Evo Morales, dentro de un proceso abierto en Tarija por el grave delito de trata y tráfico de personas. Este caso, cabe recordar, está vinculado con denuncias previas por pedofilia contra el exjefe de Estado.
La resolución de la jueza Moreno generó fuertes críticas al ser considerada “arbitraria y prevaricadora”, especialmente porque ignora que ya un juez de La Paz había ratificado plenamente la competencia de la Fiscalía y del juez de Tarija para llevar adelante el caso. “Por tanto, la orden de aprehensión, la imputación y el proceso contra Evo Morales no puede quedar anulado y sin efecto”, señalaron fuentes jurídicas.
Asimismo, se exige la inmediata intervención del Consejo de la Magistratura, a través del régimen disciplinario, y del Ministerio Público, para investigar las faltas y posibles delitos cometidos por la jueza Moreno.
Lilian Moreno Cuéllar, además de su actual cargo como jueza, fue gerente del Servicio de Impuestos Nacionales durante el gobierno de Evo Morales y ocupó altos cargos en otras entidades públicas, como la Empresa Nacional de Ferrocarriles (ENFE). Su vínculo con el anterior gobierno generó sospechas de parcialidad, pues en octubre de 2024, ya había frenado una anterior orden de aprehensión contra Morales y luego trasladó el caso de Tarija al municipio de Villa Tunari, bastión político del exmandatario. Ahora, al anular nuevamente la imputación, crecen las denuncias de que esta protección busca respaldo político de cara a las elecciones judiciales.
Frente a esta situación, el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Romer Saucedo, también se pronunció enérgicamente contra la decisión de la jueza Moreno. “No comparto que procesados por pedofilia se burlen de la justicia”, afirmó. Saucedo añadió: “Morales es procesado por presunta trata y tráfico en un caso vinculado con hechos de pedofilia. Primero nuestros niños”.