En lo que sería la primera misión sin tripulación dentro del programa Artemis de la NASA, hoy despegó con éxito el megacohete SLS, el más potente del mundo. El mismo pudo completarse tras dos aplazamientos producto de problemas técnicos hace unos meses, así como por fenómenos climatológicos como el paso de dos huracanes.
Esta misión, que tendrá un promedio de duración de 25 días, es parte de Artemis, un programa que pretende enviar a la primera mujer y a la primera persona negra a la Luna. Al mismo tiempo, el objetivo es establecer allí una presencia humana duradera, como preparación para un viaje a Marte.
La cápsula Orión, que será la resultante luego del lanzamiento, se situará en una órbita lejana durante aproximadamente una semana, aventurándose hasta 64.000 km detrás de la Luna, estableciendo un récord para una cápsula habitable. Finalmente, Orión iniciará su regreso a la Tierra, poniendo a prueba su escudo térmico, el más grande jamás construido. Si todo sale como los científicos lo esperan, el aterrizaje del megacohete en el Océano Pacífico está previsto para el 11 de diciembre.
Bill Nelson, jefe de la NASA, declaró luego del exitoso despegue:
«Este megacohete ha costado mucho sudor y lágrimas. Nos permitirá volar a la Luna y volver durante décadas».